Entrevista de Claudio Fernandez y Daniel Osimani al Fundador
“Pocho” Vergara: uno de los “culpables” de que hoy el “25” sea...
UNA ESCUELA DE VIDA...
LA CASA DE UNO DE LOS FUNDADORES DEL CLUB, FUE EL LUGAR DONDE SE VOLVIERON A REUNIR TODOS AQUELLOS RECUERDOS QUE HACE 55 AÑOS CUENTAN UNA Y OTRA VEZ DE QUIENES HICIERON POSIBLE QUE HOY TODO UN BARRIO LLEVE EN EL CORAZON A NUESTRO “25”... ASI COMENZO A CRISTALIZAR ESA ILUSION DE UNOS GURISES DE BARRIO QUE TRANSFORMARON UNA QUIMERA EN LO QUE HOY ES UNA HERMOSA REALIDAD...
“Ahora después del 50 aniversario aparecieron fundadores por todos lados. Por todas las esquinas y edificios de apartamentos.
Todo empezó en una reunión en el bar City de Rivera casi Pereira. Parábamos en el Júpiter (Rivera y Rossel y Rius) pero hubo un problemita, creo que con los precios y nos fuimos para allá arriba. Se fundó ahí como se podía haber fundado en la esquina del zoológico. Yo tenía 19, ahora tengo 70”. (Nota: entrevista realizada el 7/3/2001)
¿Cómo se les ocurrió ponerle 25 de Agosto?
“Porque se fundó un 25 de agosto, recién comenzado el día. No recuerdo a quien se le ocurrió.
Había un cuadro en Capitán Videla y 2 de Mayo que se llamaba Miramar Junior y otro en Rivera y 2 de Mayo que se llamaba Uruguay no se cuanto.”
¿Tenían sede?
“No, eran de esquina. Hasta el 6 de noviembre del 49 jugamos... Ahí hubo una reestructura, se inauguran los colores del club. Las primeras eran las de Miramar Junior. El primero jugaba con las camisetas iguales a la de Colón y la reserva con las camisetas del Chacarita Juniors de Argentina. Después compramos unas camisetas de Boca para la reserva. Después un tal Pangallo, que los padres tenían una tienda acá en la subida de Rivera y 2 de Mayo... El hijo tenía una casa de deportes frente a la empresa Sicco. En la vidriera había un maniquí con los colores de la bandera de Artigas. Julián Acosta, el tesorero de aquel entonces, las compró.
El primer banderín... Un tal Luis Echeverría fue a Mauro y Cia. y les dió los colores. Háganlo así, y así quedo, igual que ahora.”
En la federación habían como 6 divisionales ¿No? ¿Era fácil fundar un club?
“ Había más terrenos para hacer canchas. Muchos han desaparecido porque los terrenos no eran de ellos. La historia de acá es muy atípica. Había un baldío lleno de tártagos y un muro de bloques medio roto. Cuando se fundó el club, no teníamos nada y nos quedábamos en la esquina. Luego nos metimos en este terreno de atrevidos. Primero se hizo una cancha de voleibol. Se jugaba con otras instituciones de barrio. “
“Un día veo el diario y dice que jugaba 25 de Agosto y Central por el campeonato preparación de vóleibol. Yo en ese entonces era el presidente (fui 11 años seguidos). ¿Qué pasó? Unos muchachos que le gustaba el voleibol, sacaron un papel membretado y afiliaron al club. Todo falso. Tuve que ir a poner la cara a la Federación. No había tantos jugadores, no podíamos competir.”
MUCHAS COSAS PASARON DESDE AQUEL MOMENTO LLENO DE DIFICULTADES, A ESTE PRESENTE QUE NOS ENCUENTRA ORGULLOSOS DE PODER TENER UN GIMNASIO DE BÁSQUET QUE DISFRUTAN GRANDES Y CHICOS. LO QUE HOY SON TABLEROS DE VIDRIO, AYER ERAN OLLAS. LO UNICO QUE NO CAMBIA ES EL AMOR POR EL DEPORTE Y POR NUESTRO CLUB....
“Se hacían algunas domas de basquetbol. Ponían una olla de unos 10 lts. sin fondo. Una olla Sue, contra el muro de la Mera y empezaban a tirar. Un muchacho que fue incansable en eso fue Héctor Anzolabehere, luego fue jugador. Le habían puesto el Baho pues los sábados y domingos con 30 grados siempre estaba tirando a la olla. Después pusimos soportes de madera ya que la Comisión Nacional de Educación Física (CNEF) no los quería hacer pues no estabamos afiliados .Luego se hizo una secretaría en el fondo.
La cancha de basquetbol ocupa dos padrones. El terreno del fondo empezaba en Rosell y Rius y se hizo un convenio con la dueña.”
“Un día hubo una lluvia tremenda y se inundó toda la secretaría. Resultó que por acá abajo corre el arroyo Pocitos. Yo tengo una foto del año 20 y el arroyo nacía en el zoológico. Gral. Prim no pasaba para adonde ahora está Liber Arce. Después tenía distintas ramificaciones.
El club no tenía obra sanitaria, todo se iba por un pozo. Cuando vamos a hacer la sede de adelante, se encontraron que abajo era roca y agua. Tuvieron que fundamentar con bolsas de portland y no sé cuanta guita arriba. Nos llevó lo que todavía no se ha podido hacer. Uno miraba y el agua corría.
En eso que estaba todo inundado me avisan al trabajo que había llegado un telegrama. Decía que nos teníamos que ir en 20 días porque iban a rematar. Ese telegrama lo tuvimos enmarcado durante mucho tiempo y en una época quedo al sol y se borró.”
EL GIMNASIO DE NUESTRO CLUB LLEVA EL NOMBRE DE ALGUIEN QUE TUVO MUCHO QUE VER PARA QUE HOY CENTENARES DE NIÑOS Y HOMBRES LO DISFRUTEN...
UNA PLACA UBICADA CERCA DE LOS VESTUARIOS SIMBOLIZA EL AGRADECIMIENTO ETERNO DE TODOS HACIA ESTE HOMBRE....
“El dueño del terreno era un tal Severino Cristiano, estanciero, de mucho dinero. Tenía casa acá y en Blanquillo. Nos enteramos de que el hijo, en los últimos tiempos lo sacaba a pasear al viejito. Pasaba en silla de ruedas por el frente del terreno. Un día le comenta al hijo: que limpito me tienen el terreno, vendéselo a los muchachos. Y el hijo después cumplió, a pesar de que perdió plata.
En el 56 empezamos una campaña del metro cuadrado. Gestionamos algo con la CNEF. Del otro lado del zoológico estaba el doctor Genta que nos dio una mano muy grande. Afilamos mucho a la gente de la CNEF con Vallarino Veracierto a la cabeza. Lo trajimos a comer un asado a la secretaría. Los tipos nunca habían comido en un rancho atorrante hecho con tablitas de todos los colores. Los tipos salieron y dijeron: esto está fenómeno. Ahí creo que sacamos como 10.000 pesos.
Severino Cristiano hijo nos dijo: no se preocupen por la plata que falta, nos vamos a arreglar. Me mandaron a hablar con un escribano en la calle Misiones, un tal Castro Dagnino. Se portó muy bien con nosotros. Este hombre resulto ser el que regenteaba los dólares a los Tupamaros, el tesorero.
Nos faltaban 11 mil pesos y con Olga Fantausi hicimos un trato. Los terrenos no se pueden fraccionar, pero como somos una institución deportiva nos dejaron. Hace 20 años era más fácil que autorizaran ciertas cosas.
Le dimos a Olga lo que habíamos arreglado, quedó una parte atrás del tablero que era del club pero ella la reclama y la tuvimos que pagar. Y fue así que después le pagamos lo que le debíamos a Cristiano.”
DESDE NUESTRO NACIMIENTO FUIMOS GANADORES. Y DESDE SIEMPRE AL CLUB LO RESPALDO UNA HINCHADA QUE DIA A DIA SE VA HACIENDO MAS NUMEROSA Y SEGUIDORA..EL FÚTBOL FUE EN LOS COMIENZOS EL DEPORTE DONDE “25” SE HIZO FUERTE....
“El club hizo fútbol del año 48 hasta el año 60 actuando siempre en las mejores ligas. En la Liga Montevideo, que hasta tenía sede y era la única de renombre. En la Liga el Diario. En la liga Belgrano que quedaba frente a Traumatología, donde estaba una cancha de Miramar por el año 53.
Del 54 al 60 participamos en la Liga Punta Carretas. Al principio todos los cuadros del barrio eran inferiores al 25 y le querían ganar de cualquier manera. Luego los fuimos absorbiendo a todos.
El club competía siempre en ligas de rompe y raja. Siempre fue muy apoyado con un par de camiones, una bañadera y 10 coches. Era muy respetado y se podía participar en determinadas ligas porque no nos iban a llevar por delante. El club siempre ganó en casi todos lados. Si no entraba primero entraba segundo, si entraba tercero ya era un fracaso.”
RECIEN NUEVE AÑOS DESPUÉS DEL NACIMIENTO, EL CLUB COMIENZA A DAR SUS PRIMEROS Y FIRMES PASOS EN EL DEPORTE QUE HASTA HOY SE DESTACA... SE CAMBIARON LOS GOLES POR LOS DOBLES Y LAS GAMBETAS POR LAS BANDEJAS...
“En julio del 57 se afilia a la FUBB en Cuarta ‘C’. Luego subimos a la ‘B’, a la ‘A’ y más adelante a Tercera y Segunda.”
¿Qué otros cuadros había en la zona?
“En el barrio Tabaré era el que mandaba, después apareció Bohemios, con muy buena infraestructura.
Me acuerdo que estando Bohemios en Segunda llevaba hinchada de 25. Les daban damajuanas de vino y después del partido la tomaban acá en la esquina. 10, 20 litros, 30. Siempre hubo afinidad con Bohemios. También estaba el Layva.
Con el Layva era una guerra. El 25 tenía más hinchada. El Layva tenía un buen equipo y dos por tres nos ganaba. El problema era la salida de la Leonera, como todavía le llaman algunas radios a la cancha del 25. Un día los del Layva contrataron coraceros a caballo para salir por Rosell y Rius.
Después estuvo Miramar. También eran otras guerras. Al Layva le pasábamos por encima con la hinchada, pero a Miramar no. Pero había respeto, porque los guapos -esos guapos entre paréntesis- cuando saben que la otra hinchada es fuerte son muy amables; tratan de dialogar. Si están de locatarios y pueden pegar pegan, pero cuando el club va a jugar a determinados lugares, donde hay que poner el físico, resulta que están enfermos o tienen la abuelita con gripe o yo que sé. Esta es la verdad, yo en 50 años lo puede constatar. Había que ir al Barcelona, a Barrio Obrero. Una vez cerraron las puertas y casi nos revientan a todos. El Barcelona queda por el Rampla Juniors. Después apareció Verdirrojo pero en otra divisional, ya era más accesible la cosa.”
MAS ALLA DE UN ASCENSO O UN DESCENSO, DESDE SIEMPRE EL CLUB GUARDA RECUERDOS QUE SE CONVIERTEN EN IMBORRABLES. SON 53 AÑOS LLENOS DE VIVENCIAS QUE VERGARA NOS REFRESCA...
¿Qué momentos importantes recuerdas?
“La escritura de los terrenos en el ‘60. Eso fue fantástico. Se empezó en el 58. Después el primer ascenso a segunda división en el ‘67. Fue en la cancha de Colón. Se le ganó a las Bóvedas con un doble sobre la hora de Anzolabehere.
Yo soy un agradecido del club. Debe haber pocos dirigentes a los que hayan entregado tantas cosas como me han entregado a mí. Tengo plaquetas, como 15 medallas. Yo nunca hice bulla. ¡Podría tener una vitrina! Pero no, lo tengo todo ahí.
Cada vez que ponen un ladrillo en el club, un bloque, es como que lo están haciendo en mi casa. Cuando prepararon el gimnasio para el Campeonato Federal de Primera. Son cosas impensables, la gente no tiene idea, el que no conoce no tiene idea. Washington Filippini estuvo de presidente en esa época, consiguió muchas cosas para el club.”
¿Y momentos críticos?
“Al principio cuando nació ya podía haber muerto. Al final del 48. Veníamos arrastrando algo de Miramar Junior. Fuimos a Bs.As. y hubieron unos problemas con una señora. La enchastraron injustamente en un tema de dinero.
Luego quedamos dos o tres tirando con la bolsa de los equipos, juntando en la esquina la plata para el camión. Los muchachos eran muy bravos en esa época, había mucho vino de por medio.
Se ponía un pizarrón en la esquina con la integración y si no les gustaba le pegaban una patada y rompían todo. Y se ponía otra vez. Y se iba conversando con la gente.
En el año 52 perdíamos y perdíamos, se hacía agua por todos lados. No podíamos formar el primero bien. Hacíamos amistosos todos los domingos. Se levantó en el año 53 con la liga el Diario de mañana.”
“En la cancha de bochas llegue a hacer una exposición con los objetos del club. Desde el primer día hasta los 25 años. Fotos clasificadas por año, puestas en unas cartulinas. Estaba la primer bandera, el primer aro, estaba todo, todo, todo. Yo pense que me iban a robar todas las fotos, porque todos las querían. El finado Flangini que estaba en radio Sport dijo que no conocía ningún club que haya hecho una exposición así en sus 25 años. Fue muy importante.”
“Después pasó una cosa que es bien típica del 25, a Wanderers en el fútbol le dicen bohemios, y en el basquetbol el equipo bohemio es 25 de agosto. 25 puede perder con el último o con el penúltimo y a la semana entrante resulta que le gana al primero. Eso fue toda la vida.”
¿ La composición social del barrio era diferente de una lado de Rivera y del otro?
“Posiblemente... había muchos ranchos, había canchas de fútbol. Por Marco Bruto que ahora es Pocitos Nuevo, había canteras. El club siempre tuvo más influencia de Rivera para acá. Pasa en todos los barrios, el que vive de la vía para allá lo conocen porque es menos que el que vive de la vía para este lado.
Para ese lado no nos podíamos ir mucho porque estaba Bohemios.”
“En carnaval venía mucha gente de aquel lado. El carnaval se hizo como diez años, empezó como en el 70, 71 hasta el 80. Se llenaba de bote a bote, se sacaba buen dinero. Le empezamos a hacer un poco de roncha al Tabaré.
El negocio era así: la puerta bancaba los conjuntos y lo de adentro era todo ganancia, rifas, cantina. Después que pasó, que los conjuntos empezaron a subir tanto que la puerta ya no alcanzaba. Como acá es chico y no hay capacidad locativa hubo que bajar.”
¿ Cuál es la magia que tiene el 25 para lograr la inserción que tiene en el barrio.?
“Siempre tuvo buena inserción, incluso en épocas difíciles, siempre aparecen hinchas jóvenes, que no son del barrio, gritan y se desviven por el club. Y el club no les da nada, otro cuadro de repente da algún mango para que vengan a gritar, pero acá no.
Lo que seguro, es todo difícil, como acá no hay ningún Mesías que tenga plata.
Antes era más fácil juntar a la familia. Hasta el 60 se hacían banquetes para los aniversarios. Se llegó a hacer un banquete en el Jockey Club, ¡completamente desmedido! Los dos primeros fueron en el Rowing”
“En el 49 lo hicimos para hombres. En el 50, Máximo González Hache que fue un muchacho que hizo mucho por el club, que me enseñó mucho, dijo: vamos a hacerlo mixto. Yo le dije: ¡vos t’as loco, viene fulano y se toma unas copas de más! Y ahí se hizo en el Montevideo Rowing.
Luego en La Mallorquina de 18 de Julio. Yo no estaba de acuerdo con la cuestión de los banquetes, porque era una cuestión ficticia. Se hacia el banquete y había 200 personas, y las damas muy ataviadas, con sus pieles y con esto y con lo otro. Al otro día si había doscientas entraban al club 15.”
“Se hacían excursiones hasta con 5 ómnibus. El 25 siempre sobresalió por eso. Venían de otros lados y nos preguntaban: ¿ustedes como hacen? Venía mucha gente, se ponían los letreros y nosotros los ubicábamos en los distintos ómnibus. ‘Cuidando que una familia estaba peleada con esta otra’ y no los juntábamos.
Con Víctor Rodríguez a veces nos quedábamos hasta las cuatro de la mañana organizando las ubicaciones. Cuando de mañana llegaba la gente, ya estaba todo solucionado. Los borrachos en un ómnibus.
Ese fue un éxito del club impresionante. Los 25 de Agosto se iba a competir en amistosos. En Florida obtuvimos la primera copa en el año 50.”
DESDE LA CASA DE VERGARA NOS FUIMOS CON LA SENSACIÓN DE QUE RECORRIMOS 53 AÑOS EN SOLO UN RATO. TANTAS ALEGRIAS, TRISTEZAS E ILUSIONES REUNIDAS EN UNA NOTA A UNO DE LOS FUNDADORES DE NUESTRO CLUB. UNO DE LOS TANTOS “CULPABLES” DE QUE HOY EL “VEINTE” SEA.... UNA ESCUELA DE VIDA.
Edición y Colores: Claudio Fernández. Julio de 2002.
Entrevista: Daniel Osimani. 7 de marzo de 2001
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